En un primer momento podría parecer que el pararrayos es un instrumento arcaico y que ya no es necesario, pero nada más lejos de la realidad: son absolutamente necesarios para evitar que la caída de un rayo una tormenta eléctrica pueda afectar a un edificio o incluso a las personas que habitan en su interior. Por ello, la instalación de un pararrayos en una comunidad de vecinos de una forma adecuada y sin errores es de vital importancia.
¿Quién debe realizar la instalación de un pararrayos en una comunidad de vecinos?
Hay varios pasos a tener en cuenta a la hora de instalar un pararrayos. El primero, y el que evita todos los problemas que puedan surgir de una mala colocación, es el de dejar en manos de profesionales en la instalación de pararrayos este proceso. Debido a que las empresas especializadas en este trabajo conocerán todos los requisitos a tener en cuenta para que la instalación de sistemas contra el rayo sea correcta y garantice la seguridad para los propietarios del inmueble.
¿Qué hay que tener en cuenta para la instalación de pararrayos?
Una de las cosas más importantes a tener en cuenta es que debe superar, con un mínimo de dos metros, el punto más alto de la construcción que protege. Solo así estará asegurado que el rayo será absorbido por el pararrayos sin problema.
Otro punto a considerar está en los bajantes a tierra: ¿cómo están colocados? Es importante cerciorarse de que estén lo más verticales posible, para que no se produzcan problemas en el momento de la canalización de la energía.
Y también habrá que tener en cuenta el nivel de seguridad que se debe cumplir según la zona en la que el pararrayos será instalado. Esto dependerá del nivel de tormentas y descargas eléctricas que se produzcan en la zona al año, pero los profesionales instaladores de pararrayos son conocedores de todos estos datos, con lo que ellos sabrán cómo realizar la instalación de sistemas contra el rayo según estos parámetros.
Vivir en un entorno seguro es algo no solo necesario, sino obligatorio en la actualidad. De este modo se evitan sustos en el caso de que una tormenta eléctrica pase por encima de nuestras cabezas.